Fremm ofrece a los talleres un servicio de autodiagnóstico para superar la Inspección

FREMM ofrece a sus talleres de reparación de automóviles un servicio de autodiagnóstico que le permitirá afrontar la nueva Inspección de Consumo que ha lanzado la Comunidad Autónoma de Murcia.

Con el fin de que los talleres de reparación de automóviles comprueben que cumplen con la normativa vigente en materia de consumo, FREMM ha elaborado un programa de autodiagnóstico que es muy similar al protocolo que sigue la Inspección. Un sistema que pueden solicitar todos los socios de forma completamente gratuita.

El servicio complementa la atención de FREMM al colectivo, ya que pone a disposición de sus asociados, de forma también gratuita, carteles informativos, hojas de reclamación, modelos de orden de reparación y resguardo de depósito…. y cuanta documentación e información precise para superar con éxito la visita de los inspectores.

En la visita, los inspectores comprueban que los talleres ofrecen a sus clientes toda la información que exige la normativa, que tienen expuesto los carteles de precios,  horario de apertura y hojas de reclamaciones.

Verifican que tanto la orden de reparación, presupuesto, resguardo de depósito y facturas cumplen con la normativa vigente y comprueban el precio de la factura de compra  de las piezas se corresponde con el que se le cobra al cliente.  FREMM recuerda, asimismo, que en el caso de haber descuentos, éstos deben ser trasladados al cliente.

Las revisiones iniciadas por Consumo supervisarán también, por primera vez, que los establecimientos tienen la autorización previa del cliente para usar piezas de repuesto recicladas o de segunda mano

Estas inspecciones se extenderán durante todo el verano y se harán en establecimientos de toda la Región. Las sanciones a las que se enfrentan los empresarios de los talleres por infracciones leves van desde una amonestación por escrito a una multa de entre 200 y 5.000 euros. Asimismo, las infracciones graves conllevan una sanción de entre 5.001 a 30.000 euros.

Se consideran infracciones leves, entre otras, el incumplimiento de la normativa, como la ausencia de hojas de reclamaciones, no anunciar los precios o no entregar el resguardo de depósito del vehículo.

Por su parte, las infracciones graves son aquellas conductas intencionadas de engaño o fraude que influyen en el importe cobrado, por ejemplo, instalar piezas usadas y no informar al cliente cobrándolas como si se tratara de piezas nuevas, facturar piezas reparadas sin que realmente hayan sido sustituidas, etc.

Para resolverle todas sus dudas al respecto, puede contactar con María José Aragón, Economista de FREMM, al teléfono 968 93 15 02 o e-mail: mjaragon@fremm.es.